9 de enero de 2009

¿Dónde vas con las banderas y aviones?

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¿Dónde vas con las banderas y aviones
y todo el círculo de cañones
con que apuntas a mi pueblo?


¿Dónde vas con la vergüenza por galón
si en el fusil llevas el miedo
con que apuntas al pueblo?


¿Dónde vas cuando ya el niño
no quiere jugar
porque la calle
rebosa de sangre
y eres tú quien la llena?


¿Dónde vas cuando ya el niño
no puede ni mirar
el azul del mar,
ni este cielo claro
y eres tú quien lo roba?
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Lluís Llach, Canción sin nombre.

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"Pobre del cantor de nuestros días...", decía aquella canción de los años sesenta, cuando los de siempre arrasaban con napalm las aldeas vietnamitas.
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(...aún recuerdo la foto de ese padre perdido en la carretera, como sonámbulo, con ese niño en brazos...)
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"... Pobre del cantor que no arriesgue la cuerda...", decía aquella canción en los setenta, cuando en latinoamérica proliferaban (como setas en otoño) las dictaduras instigadas por los de siempre.
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(...todavía recuerdo las manos machacadas de Víctor Jara... los desaparecidos argentinos... los exiliados uruguayos...)
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"...Pobre del cantor que nunca sepa...", decía aquella canción en los ochenta, cuando los de siempre vetaban en la ONU (un organismo muerto, no moribundo) la condena de las tropelías que sus aliados -los de siempre- seguían haciendo por el mundo...
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...y en los noventa...
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...o ahora mismo...
...
Siempre... los de siempre.
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Codorníu.
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21 comentarios:

Marisa Peña dijo...

Siempe los de siempre Pepe, porque si calla el cantor calla la vida. LLoro escuchando a LLuis Llach y dejo que mi llanto se haga uno con todos los llantos de la tierra, con todos los que, ayer, ahora y siempre decimos NO, Basta ya. Gracias compañero, por estar en la brecha, por no tirar la toalla de la denuncia, por no mirar hacia otro lado cuando los niños sufren y los pueblos se desangran y se han decretado las rebajas :pan y circo . Un abrazo

Anónimo dijo...

Mientras el mundo sea mundo y el dinero lo mueva, todo será igual, cíclico, destructivo, los mismos perros con distintos collares mueven sus hilos. Esta canción de Llach, la he cantado a pleno pulmón en muchos conciertos, es brutal.
Vengo del blog de pizzar completamente destrozada y con la impotencia por bandera, imaginar su sufrimiento, sentirlo, leer esas letras de hoy me han dejado totalmente afectada. Te lo digo porque se que tú también la aprecias mucho.
Un beso Pepe

mangeles dijo...

Que bonito . Hasta las tragedias son hermosas cuando las cuenta un escribidor. Muy bello amigo PEPE.

Inuit dijo...

..y cuando los de siempre son tan pocos
y los mismos, tantos
El salpicado de muertes es el juego de los grandes
y el dolor y el desgarro no conmueve ni a las piedras
Por los ríos corre la hiel que beben los poderosos
disfrazados de cáliz de la fe, estandarte aleccionador
escarmientos por la gracia de su dios.
Cuando la palabra no es el medio y al muerte el fin
la esperanza tirita gélida y mastica muertos
los de siempre tienen razones y argumentos
y somos tantos y sobramos los mismos
matamos ratas
hacemos huecos
limpiamos vertederos
escarmentamos las diferencias
asentamos el poder desde la ignominia
Entretanto la pasividad del mundo, mira
eso sí, pero informa
sssssss!!!!!!!!!
no pasa nada
están lejos
y dormimos tranquilos
y los de siempre mejor.
Inuits

PIZARR dijo...

Pepe, así es por desgracia, todo es cíclico, la vida en un bucle en el que si nos fijamos un poco, nada cambia.

Nos llenamos la boca de grandes logros y descubrimientos y rodeamos nuestra vida de infinidad de cosas materiales.

Al final analizas esas canciones de cada década y son todas iguales... todas sirven aqui y ahora.

Un millón de gracias por estar, por ser y por mil cosas más.

Me llega tu cariño

Un beso y un fuerte abrazo

mera dijo...

Pues eso, seguir peleando, alguna vez ¡No pasarán!, pero no hay nada que hacer cuando todo el mundo pasa de todo...

lys dijo...

Y no caen inertes a lo largo del cuerpo los brazos de la guerra,

no, sino que se levantan y elevan sin pudor los cuerpos de tantos hijos, padres y hermanas.

Maldito todo el que toma la vida de otro, maldito.

Tengo el corazón tan pesado que no sé lo que digo.

Gracias por tus palabhas de ánimo.

Un abrazo.

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Mira Pepe estoy en una etapa de descreimiento: no me creo a ningún político, no me creo a los palestinos, no me creo a los israelitas.
No me creo a rojos con alma de buitre, no creo en muchas cosas porque me jode que manipulen mi cabeza y traten de vestir a la mona de seda.
Y para ti un beso de los gordos

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

EH, corazón, ¿por qué te has enfadado conmigo? mis palabras no van en contra de tu persona, pepe, simplemente hoy me he levantado hasta las narices con tanto toca pelotas con la paz, la justicia y cada uno va a lo suyo y le importa un bledo su vecino y al leer tu trabajo me ha salido la rabia.
No más, venga Pepe, no me digas que eso no te lo hubieras esperado de mí.
otro beso sin adiós

Maria Coca dijo...

Parece que en muchos aspectos el mundo no avanza. Seguimos igual que siempre. El poder por el poder. El fuerte sobre el débil...

Besos cercanos, Pepe.

mjromero dijo...

Cuando empiezan las noticias... ya no sé si cerrar los ojos, porque siempre las bombas caen del mismo lado, y he de confesar que siempre soy partidista nunca puedo quedarme indiferente ni neutral, la verdad prefiero que no caigan de ningún lado...pero ya que caen que caigan repartidas, no? Cuando todo es cuestión de fuerza dineraria.
besos.

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

... He seguido pensando, sabes, y me faltó añadir (hablé de rojos) que los azules son exactamente iguales...
Un beso de paz, al menos entre tú y yo.
Buenos días, Pepe

carlota dijo...

Interesante ese recorrido que nos muestras. Las injusticias no cesan, parece que no aprendemos.
Un abrazo

mangeles dijo...

Decia..y se ha borrado..que en la foto no me había fijado yo...y que me mola...y que te la mango...un besito

Patricia Angulo dijo...

Las guerras son un gran negocio que los de siempre saben manejar muy bien, total sus vidas no corren peligro alguno.

Qué asco de gente.

Me quedo con tu mirada Pepe, con tu recuerdo, y sigo soñando, imaginando un mundo de paz como decía Lennon, sé que soy un soñador, pero no soy el único.

Un abrazo.

JUANAN URKIJO dijo...

Estos alegatos contra la guerra tenían que ser los nuevos catecismos.
Gracias, Pepe; por Llach y por lo tuyo.

Un abrazo.

Patricia Angulo dijo...

:) Gracias Pepe :)

JUANAN URKIJO dijo...

¿Sabes, Pepe? Veo montañas de cariño y solidaridad en los comentarios que preceden al mío. Quédate con ello. Y, nuevamente, gracias por esta entrada.
Un abrazo.

"La solidaridad es la ternura de los pueblos" (Ernesto Cardenal).

Patricia Angulo dijo...

En el post que termino de subir, hay un guiño para vos, y es la frase que ayer te gustó, hoy la puse mas completa.

Me venía como anillo al dedo :)

Besos.

Gregorio Omar Vainberg dijo...

Pepe, y asi seguimos, dentro de estos ciclos, espirales, siempre más de lo mismo, y en esta nueva ofensiva, la tendencia es empeorar, cuando vemos las noticias, nos parece, que no puede ser peor, pero, ahi está , puede, ahora quemaron comida, y las estadisticas estan ahi... seguimos contando nuestros muertos.
o llorando.
pero aun existen voces contra los asesinos.
Um abraço

Tony dijo...

mas de lo mismo por otros nuevos.

continuara...