1 de agosto de 2011

Estrella y yo no pasamos hambre, porque trabajábamos los dos y no teníamos hijos por aquel entonces. Incluso tuvimos suerte por tener un piso para nosotros solos (la gente normal alquilaba habitaciones con derecho a cocina); aunque tuvimos que rodar en varias ocasiones de un lugar para otro, hasta que nos estabilizamos en una buhardilla, que para nosotros fue como un chalet de ahora.

Allí nació nuestro hijo. Recuerdo que llegábamos rendidos de trabajar todo el día y Estrella tuvo que pedir una excedencia. No recuerdo bien si fueron cinco o seis años. Nuestros ingresos bajaron; pero yo me coloqué los fines de semana de acomodador en el Campo del Real Madrid y, con lo que me pagaban y las propinas, apenas notamos la pérdida del salario de mi mujer.

Sin embargo, no todo lo que me trajo este empleo fue positivo. En mi trabajo diario, el encargado era del Aleti  (Atlético de Madrid), de esos que odian profundamente todo lo que huela a "merengue".  Padecí cuarenta años de persecución por parte de este individuo, llenos de anécdotas y ejemplos, que no voy a relatar aquí porque tendría que traerlas de una parte de mi memoria que esa sí que no tengo ningún interés en recuperar.

No sé que es peor: si tener enemigos por el fútbol o por la política.

(continuará)


Pepe padre.

4 comentarios:

mangeles dijo...

Yo cada día estoy más convencida de que una persona dispuesta a hacer daño a los que le rodean es lo peor que podemos encontrarnos en el trabajo. Y el problema, es que hoy en día, ese tipo de gente son mayoría.

Un beso D. José.
Para tí otro Pepe...no lloriqueeessss

Anónimo dijo...

Ostras D. José, parece mentira lo que son las cosas en la vida, la de trabas que nos pone, tendría que estar prohibido eso, que un hincha atlético pueda ser encargado de su rival más acérrimo, y tenerlo que aguantar 40 años, uffff, no quiero ni pensarlo. Cada vez que voy leyendo los episodios de su vida, entiendo mejor, porque su hijo lleva la palabra RESISTIR, grabada en la piel.

No pierda la memoria D. José, cómo si no, podriámos disfrutar y aprender de la experiencia y de la memoria histórica contada en vivo y en directo. Un lujo.

Un abrazo y un beso a los dos

Maria Coca dijo...

El fútbol en este país es tan importante como la política. De hecho, creo que mueve más a mayor número de personas. Es así, por lo que imagino la cantidad de penurias que tuvo que pasar tu padre. Menuda papeleta...

Qué interesante. Una vida plagada de lucha y más lucha.

Dos besos para cada Pepe.

FLACA dijo...

Yo creo que para la gran mayoría de la gente el fútbol es MUCHO más importante que la política. Creo firmemente que si todos los que vemos fanatizados por el fútbol pusieran toda esa energía,ese amor y esa constancia en cambiar el mundo para mejor, viviríamos como unos reyes felices( que también debe haber de los otros)

En cuanto a lo de Madrid, Pepe, por acá se habla poco de eso. Hoy miraré el noticiero de las 8 con atención.

Me gustó esta última entrega de don José, hasta le encontré un tinte de humor.

¡Qué curioso!, casi no me percato que yo también me llamo estrella.
Un abrazo géliiiidddooo .